lunes, 28 de febrero de 2022

Inaccesible


    De las orillas más cercanas al mundo tangible, decidió extraer el certero inventario de los conceptos más valiosos. Vocablos tatuados en sectores invisibles al común de los mortales, ocultos por una calculada sucesión de ropajes sucesivos, pero diluidos sutilmente en los quehaceres cotidianos de los días y las horas.  

    De las lógicas policiales de una novela inquietante, vino a construir los sonidos oportunos con los que hermanar las páginas y las palabras de dos realidades no confluyentes. Acariciando con músicas previas, los hechos y las tramas de un lugar al que llamaban Aurora.

    De las trayectorias fabricadas por un millar de conversaciones imprevistas, decidió obtener el auge poderoso del verbo conocer, establecer los puntos cardinales del juego de las preguntas y los listados, para sembrar luego -más que enterrar- las semillas que hacen florecer la selva ingobernable de las posibilidades.

    Del miedo al tener miedo de los miedos del pasado, entresacó los materiales para convertir una parte del aire circundante en algún tipo de frontera, defendida por el eco de una culpa imaginada y gestionada luego por un heterogéneo elenco de generosas complicidades.

    De las miradas en pausa que atraviesan las almas, como los pasillos hacen con los edificios, adquirió la timidez hipnótica de los silencios. Igual que la calma que sigue a los terremotos en ascenso, consigue apaciguar las moléculas temblorosas gritadas por las grietas de la tierra. Igual que la escucha paciente consigue serenar el tumulto caótico de los niños agitados. Igual que la distancia adecuada consigue atenuar la tentación absorbente de los acantilados.

    Y finalmente, de la sacudida definitiva hacia una nueva vida, del salto de la clausura clínica y segura a la brújula impagable de la comprensión adolescente, decidió extraer el precio del tiempo y de los riesgos. Viaje llamado a la consecución del éxito, aunque éste pueda elevar un poco más las mareas que rozan las orillas del mundo tangible, y otorgar a los ojos de los mortales un - tal vez injusto - velo de perfil inaccesible.